{image}http://www.eldia.co/images/stories/210510/08.jpg{/image}Tras un año de entrada en vigencia de la reforma financiera (Ley 1328/09), las sociedades administradoras de fondos de cesantías están listas para la puesta en marcha de una de las medidas más ambiciosas en materia de seguridad social para el usufructo de filibusteros de los grupos económicos y del sector financiero verdaderos depositaros de las bondades legislativas promovidas por el Gobierno y sumisamente aprobadas por los voceros y representantes del empresariado y de los fuertes grupos económicos y financieros que ostentan las mayorías en el Congreso de la República.
Las altas rentabilidades logradas en el 2009 se originaron en la evolución positiva de los mercados financieros, que generaron valorizaciones constantes en los portafolios de inversión. Los títulos de renta fija y variable en que las Administradoras de Fondos de Pensiones y Cesantías (AFP) invierten los dineros de sus afiliados mostraron precios elevados, que rompieron todos los pronósticos.
Los dos principales activos que compran las AFP son los Títulos de Tesorería (TES), que emite la nación para su endeudamiento interno, además de las acciones. Los TES se valorizaron más de 20 por ciento en el año por efecto de la baja de las tasas de interés que se dio a lo largo del 2009.
Por su parte, las acciones subieron más del 53 por ciento medidas por el Índice General de la Bolsa de Colombia (Igbc). La valorización de los mercados benefició también a los más de 8,7 millones de afiliados a los fondos de pensiones obligatorias que hay en el país.
Miguel Largacha, presidente de la AFP Porvenir del Grupo Aval, dice que "en el 2009 los mercados financieros tuvieron un excelente desempeño como respuesta a las medidas económicas implementadas por las autoridades alrededor del mundo para impulsar la actividad productiva, golpeada por la crisis financiera internacional. No debemos olvidar que las estrategias de inversión en Porvenir están diseñadas para generar importantes beneficios para nuestros afiliados, no solo en el 2010, sino hasta que la edad de retiro".
Por su parte, el presidente de Asofondos, Santiago Montenegro, dice que en las ganancias del 2009 tuvo gran influencia la evolución de los mercados internacionales que habían caído a niveles históricos en el 2008. "Las rentabilidades fueron fruto del buen desempeño de las acciones tanto nacionales como internacionales. Por ejemplo, el Colcap (un indicador de la Bolsa) presentó un incremento cercano al 60 por ciento. También por un muy buen desempeño de los bonos de deuda los cuales se beneficiaron de un escenario de expansión monetaria del Banco de la República, el cual redujo su tasa de interés de intervención en 6,5 por ciento. En el caso de las acciones, el fuerte incremento se atribuye en especial a las expectativas de recuperación económica de la mayoría de los analistas mundiales.
Por otra parte cabe recordar que durante el cuarto trimestre del 2008 los precios de las bolsas internacionales presentaron las mayores caídas desde la década de los treinta, generando así un escenario de precios bajos con altos potenciales de valorización".
Los analistas advierten que este año no pinta tan bien por los efectos de una mayor inflación y los posibles incrementos de las tasas de interés. "El 2009 fue un año atípico y probablemente no se repita pronto. Esos años extraordinarios se dan porque en el pasado hubo desequilibrios fuertes. Esto se vio en que el 2008 fue un año malo y, en cambio, el 2009 registró un excelente comportamiento. Por eso hay que mirar a largo plazo y no pararse en un año puntual para mirar las rentabilidades de las pensiones y las cesantías", advierte Manuel Felipe García, director de investigaciones económicas de la AFP Skandia.
El presidente de Porvenir, Miguel Largacha comparte esa visión: "Es importante insistir en la necesidad de evaluar las inversiones con una mirada de largo plazo y no con una cortoplacista. Nuestros afiliados han recibido desde 1995 retornos por 12,24 billones de pesos en sus cuentas individuales, lo que equivale a 10 por ciento por encima de la inflación. Este resultado debe convencer a los colombianos de que es mejor estar en el sistema de ahorro individual y en Porvenir como líder en afiliados y valor de fondo".
En el mercado existe la esperanza de que la entrada en vigencia de los multifondos ayude a mejorar la rentabilidad de los depósitos. "La entrada de los multifondos en cesantías ha creado una expectativa positiva en el mercado porque permite a los trabajadores optimizar este beneficio con portafolios a la medida de sus necesidades, logrando de esta manera la personalización que debe tener el producto", dice un análisis de la AFP BBVA Horizonte.
Las inmensas ganancias obtenidas por los todo poderosos grupos financieros nacionales y extranjeros que manejan tanto las cesantías y pensiones de los trabajadores colombianos –Horizonte, Colfondos, ING, Porvenir, Protección, Skandia entre otros- , se verán incrementadas de manera desproporcionada producto de las medidas implementadas por la reforma financiera de la Ley 1326 y la entrada en vigencia del Decreto 4900 de 2009.
Desde el 1º de julio, sus afiliados podrán decidir cómo se distribuirán sus ahorros en los portafolios de inversión de corto y largo plazo, teniendo en cuenta sus expectativas sobre el riesgo y la rentabilidad, y siguiendo las reglas establecidas en el Decreto 4600 del 2009, que reglamentó el esquema de administración de esos portafolios.
De esta manera, se materializará el principio de libertad de elección que introdujo la reforma, con el propósito de garantizar que los afiliados, una vez informados, elijan el perfil que mejor se ajuste a su edad y a su nivel de riesgo, para lograr el mejor retorno posible cuando terminen de acumular sus aportes o cuando adquieran su derecho a la pensión bajo la modalidad de retiro programado.
Los portafolios están operando desde el 1º de enero. El dinero que los afiliados tenían ahorrado hasta esa fecha se pasó al portafolio de largo plazo. En cambio, los aportes que se han consignado de ahí en adelante entraron al de corto plazo. Ahora, cuando la facultad de libre elección se haga efectiva, los aportes podrán distribuirse entre uno y otro portafolio, en cualquier porcentaje, sin limitación.
El Decreto 4600 del 2009 autorizó a las sociedades administradoras de fondos de pensiones y cesantías para ofrecer dos portafolios de inversión. El de corto plazo se dirige a los afiliados que proyectan retirar sus cesantías en un período próximo. Este régimen de inversión busca mitigar el riesgo generado por la concentración de flujos de los retiros. En cambio, el de largo plazo está orientado a administrar los recursos de los afiliados que no tienen proyectado retirar sus cesantías antes de un año. Por ello, existe una expectativa de mayor riesgo y mejor rentabilidad.
Los retiros parciales
La Superintendencia Financiera aclaró que las condiciones para retirar las cesantías no experimentaron ningún cambio con la Ley 1328/09. Por lo tanto, pueden retirarse de manera definitiva al término del contrato de trabajo o, parcialmente, para educación o vivienda. También precisó de qué manera se afectarán los recursos distribuidos en los portafolios, una vez se lleve a cabo un retiro parcial. Las solicitudes de retiro afectarán, en primer lugar, el saldo disponible en el portafolio de corto plazo y, en caso de no ser suficiente, el remanente se deducirá del saldo que haya en el portafolio de largo plazo.
Si las cesantías sirven como garantía de cualquier obligación del afiliado o son embargadas, la afectación de los recursos a tales gravámenes se realizará sobre los saldos del portafolio de largo plazo y, después, sobre los de corto plazo.
Selección del perfil
Los afiliados a los fondos de cesantías pueden elegir su perfil de administración a partir del 1º de julio. Si no realizan la respectiva selección, cada año se efectuará el siguiente procedimiento:
Los nuevos aportes consignados desde el 1º de enero de cada año ingresarán al portafolio de corto plazo.
La administradora deberá trasladar, entre el 16 y el 31 de agosto de cada año, los saldos existentes en el portafolio de corto plazo al portafolio de largo plazo.
Los aportes consignados entre el 1º de septiembre y el 31 de diciembre de cada año se acreditarán en el portafolio de corto plazo.
Para seleccionar o modificar el perfil de administración de las cesantías, los afiliados deberán diligenciar el formato escrito que las administradoras deben poner a su disposición, el cual debe contener la información mínima establecida por la Superfinanciera.
El cobro de comisiones
Las comisiones por administración serán fijadas por las sociedades administradoras. La comisión del portafolio de corto plazo puede ser de hasta el 1% anual del valor del portafolio, y la del portafolio de largo plazo, de hasta el 3%. Además, las administradoras podrán cobrar una comisión sobre cada retiro anticipado de hasta el 0,8% sobre el valor del retiro, independientemente de que afecte recursos de uno o ambos portafolios.
Derechos de los afiliados a un fondo de cesantías
Elegir el Fondo de Cesantías que considere y trasladarse voluntariamente cuando así lo decida conservando la composición del ahorro previamente elegida.
Tener una cuenta individual a su nombre compuesta por dos subcuentas: una de Corto y otra de Largo Plazo y beneficiarse de los rendimientos que éstas generen.
Seleccionar el portafolio en el que desea ahorrar sus cesantías, bien sea en el corto o largo plazo o en ambos, es decir, definir su perfil de administración.
Conocer la composición de los portafolios de la administradora donde se encuentre afiliado y las rentabilidades asociadas a los mismos, así como el valor de las comisiones cobradas tanto por la administración como por el retiro de sus cesantías.
Retirar el dinero depositado en las administradoras, por las causas y en los tiempos legalmente previstos.
Recibir semestralmente el extracto de su cuenta de cesantías.
Participar con voz y voto en la asamblea de afiliados al Fondo de Cesantías al que esté afiliado.
Obligaciones de los afiliados a un fondo de cesantías
No afiliarse a más de un fondo de cesantías por cada contrato de trabajo celebrado con un mismo empleador.
Pagar la comisión de administración, siempre que el portafolio del fondo obtenga una rentabilidad superior a la mínima establecida por el Gobierno Nacional.
Dar aviso, tanto a la sociedad administradora como a su empleador, en caso de desear trasladarse de Fondo de Cesantías.
Cumplir los requisitos y procedimientos establecidos para el retiro parcial o total de sus cesantías.
Nada resulta más inteligente para los trabajadores, que en lugar de poner al vaivén de las reglas del mercado y de los inversionistas de bolsa, los ahorros obtenidos por cesantías que constituyen un verdadero patrimonio para su inmediato futuro y el de sus familias, se busque una alternativa distinta a la voracidad de los grupos financieros y mantener o trasladar estos recursos a una entidad pública en la que se encuentre el pleno respaldo del Estado en caso de la quiebra, producto de las inversiones efectuadas por éstos mercaderes, por ello, es imperioso que fortalezcamos el Fondo Nacional de Ahorro como entidad pública y para la garantía real y efectiva de nuestro patrimonio y el bienestar de nuestras familias.