Se prenden las alarmas en todo el eje cafetero por la liquidación de 3 clínicas y 16 centros ambulatorios de Caldas, Risaralda y Quindio. El gobierno nacional mediante el Decreto 452 de Febrero 15 de 2008, ordenó el cierre inminente de las entidades prestadoras del servicio de salud.

 

La Empresa Social del Estado (ESE) Rita Arango Álvarez del Pino está conformada por tres clínicas de mediana  y alta complejidad (Villa Pilar en Manizales, Pío XII en Pereira y San José en Armenia) con 16 Centros de Atención Ambulatoria distribuidos en el Eje Cafetero y que atienden a 166.953 usuarios de esta región del país.

La liquidación de las entidades afecta a los usuarios y a los funcionarios vinculados a través de contrato en nómina a las instituciones prestadoras del servicio quienes no saben cuál será su destino con la determinación del gobierno nacional.

“El personal asistencial seguirá vinculado normalmente a sus tareas y los servidores públicos en funciones administrativas…”.

“…Una vez se expida el decreto de supresión de cargos, se reconocerán y cancelarán las prestaciones sociales e indemnizaciones, en la forma prevista en las normas legales y serán atendidos por el agente liquidador, que es la Fiduagraria”.  Asegura el ministro de protección social Diego palacios.
Hasta hoy, han entrado en liquidación las ESEs Luis Carlos Galán Sarmiento, Rafael Uribe Uribe, Policarpa Salavarrieta y José Prudencio Padilla, y dónde CAPRECOM ha sido la entidad que reemplaza la prestación del servicio.

Diego Palacio Betancourt señaló que hasta el momento han sido intervenidas 22 clínicas y 75 centros de atención ambulatoria en todo el país, que pertenecían al Instituto de Seguros Sociales.

“Mejorar el servicio” es la justificación del estado para la liquidación de las entidades. Esperemos que esta etapa de “modernización” y “mejora” se vea reflejada en la atención a los usuarios, que siempre son los principales afectados por las decisiones arbitrarias en pro del “beneficio y excelente servicio”.