El yogurt y las bebidas fermentadas contienen bacterias llamadas probióticos organismos vivos que al ser ingeridos  regulan el funcionamiento del intestino y regeneran la flora intestinal, el interés en las terapias preventivas y suplementos nutricionales han aumentado en los últimos años y han obtenido resultados favorables.
 
Estos productos que contienen  probióticos, concentran un tipo de bacterias de la familia lactobacillus, capaces de mejorar la función digestiva. Según los hallazgos presentados en Sidney en la conferencia “Digestiva del Pacífico Asiático”, los probióticos pueden desempeñar un papel relevante en la prevención y tratamiento de problemas gastrointestinales graves que incluyen la enfermedad intestinal inflamatoria (EII).

De la flora intestinal se escucha siempre hablar pero no siempre se alcanza a medir su importancia y tampoco su magnitud. La flora intestinal  esta conformada por la colonización de microorganismos benéficos, que no sólo conviven y se nutren con el hombre sino que, además, ayudan a su sistema digestivo a cumplir tareas importantes, muchas veces indispensables para la vida, siempre importantes para el bienestar.

Es bastante difícil calcular con precisión cuántos microorganismos colonizan la parte interna del sistema digestivo (siempre se habla del tracto que va de la boca al ano).

Sin embargo, los especialistas aseguran que llegan a ser 100 millones de millones de bichitos en permanente función. Estos microorganismos son autóctonos, nacen, reproducen y mueren dentro del organismo. Todo esto, sin que nos percatemos de ello. Salvo, por supuesto, cuando comienzan a disminuir y que, con ello, se presentan problemas en la digestión.

Los efectos benéficos en la salud por el aumento de estos microorganismos,  incluyen tratamiento y prevención de la diarrea por Rotavirus en niños y reducción de la diarrea asociada con el consumo de antibiótico. También se ha encontrado que contribuye en la reducción de la diarrea del viajero, vaginitis, infecciones urinarias, alergias a los alimentos y reacciones atópicas en niños y que pueden mejorar la intolerancia a la lactosa. Se han informado resultados prometedores en personas con enfermedad inflamatoria del intestino, enterocolitis necrotizante y colon irritado.

Intervienen en la reducción del colesterol. En este aspecto, el mecanismo de acción no está bien definido pero se entiende que algunas bacterias asimilan el colesterol y facilitan su excreción, impidiendo que permanezca en el organismo. Asimismo estimula en sistema inmune ayudando en la prevención de enfermedades como el cáncer de colon.

El mercado ofrece productos con probióticos, pero no solo estos los contiene, una buena alimentación rica en frutas y verduras, hace que el interior de nuestro sistema digestivo funcione adecuadamente, sin tener que recurrir a la ingesta adicional.

Lo último...