En los últimos días se ha escuchado el rumor, sobre la decisión del gobierno nacional por privatizar el Hospital Militar, el Ministerio de la Protección Social, ha planteado liquidar el hospital sin medir las consecuencias que esto acarrearía para los militares activos, retirados, pensionados y en general todo los usuarios que se benefician con los servicios que presta la entidad.

El presidente de la Asociación Colombiana de Oficiales Retirados de las Fuerzas Militares (Acore), el General Zamudio Molina, afirmó que “la privatización de este centro hospitalario, no puede ser un negocio para el gobierno que se sustenta en la seguridad democrática”.

Y sostuvo además “que los costos de la atención de los heridos en combate son muy altos. No se puede pretender que esa obligación se traslade al sector privado y mucho menos a los uniformados que han sido afectados defendiendo las instituciones".

El argumento utilizado para programar la liquidación, se basa en que el pasivo pensional es el responsable del problema económico que vive en estos momentos el Hospital.

La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) se pronunció al respecto,  manifestando “que como establecimiento público adscrito al Ministerio de Defensa, regido por el Decreto 2701 de 1988, éste debe estar a cargo del Estado y más exactamente del Ministerio de Hacienda, máxime cuando el Hospital Militar hace parte de un régimen especial y su misión es atender la salud de las Fuerzas Militares y sus beneficiarios”.

Se enuncia respaldo y total rechazo por la propuesta realizada por el Ministerio de la Protección Social, la CUT apoya a los trabajadores agrupados en la Asociación de Servidores Públicos del Ministerio de Defensa (ASEMIL), y notifica que ha tramitado ante el Presidente de la República una audiencia con el fin de que se expongan y argumenten las razones de la privatización.