El problema radica en que son dos propuestas distintas pues “la propuesta presentado por Santos simplemente le cambia el nombre a las EPS y cambia el nivel de intervención de las empresas privadas en la prestación del servicio de salud, lo que a todas luces mantiene la problemática estructural que ha llevado a que el sistema colombiano de salud colapse” explicó Yesid Camacho, Fiscal Nacional de ANTHOC. La otra por su parte pretende entregar los recursos de la salud directamente a la base presupuestal de los hospitales a través de las administraciones regionales y municipales, fortaleciendo a su vez los mecanismos de control para evitar la corrupción, lo que de tajo eliminaría las EPS.
El proyecto de ley que impulsan las organizaciones sociales, sindicales y estudiantiles es presentado por el senador Luis Carlos Avellaneda y se pretende que se realicen algunos cambios constitucionales para garantizar la gratuidad, la excelencia y cobertura total en la prestación de salud, se espera que antes de que termine el periodo legislativo se apruebe este proyecto estatutario a través de un mensaje de urgencia que le saldrán a exigir las organizaciones sociales en diferentes movilizaciones al gobierno nacional. Para el próximo periodo legislativo se espera que se apruebe las leyes ordinarias que den sustento jurídico a la propuesta.
El proyecto de ley estatutaria presentado por las organizaciones sociales pretende además cambiar el paradigma hospitalario, pues pretende mostrar que la salud no es solo una serie de acciones que se lleven a cabo cuando la persona está enferma sino que es un asunto intersectorial que se debe garantizar con agua potable, vivienda digna, empleo decente, nutrición y alimentación adecuada garantizada por el estado. Es decir en estos dos proyectos de ley se apuestan intereses diferentes, o triunfa el negocio o triunfa el bienestar de los colombianos, eso solo lo decidirá el congreso.