Los trabajadores de la salud se han ido vinculando gradualmente. Anthoc ha orientado que arrancaran el paro en los hospitales más grandes y paulatinamente se sumaran los más pequeños, así que en el transcurso de la semana serán más instituciones las paralizadas. Y se espera que las comunidades se unan a la jornada en los hospitales.
Yesid Camacho, fiscal de Anthoc, informa que hasta el momento no se han reportado intentos de agresión a trabajadores de la salud por parte del Estado. Los únicos incidentes han sido que en el Hospital de Kennedy, en Bogotá, la fuerza pública abrió la puerta del hospital por la fuerza y violentado la misión médica. En Lérida, Tolima, el hospital permanecía militarizado desde hace dos noches, pero finalmente retiraron a la policía y los trabajadores ejercieron su derecho a la protesta.
“Ha habido muchos hostigamientos, mucha amenaza y mucha presión. Este es un gobierno que antes que resolver los problemas y dedicarse a buscar una salida negociada, se dedica a amenazar y agredir a los trabajadores”, manifestó Camacho.
Aún no ha habido contacto alguno con el Presidente de la República. Se radicó un pliego de peticiones, donde es claro cuál es la posición del sindicato, especialmente referente a la reforma a la salud. Este miércoles se reuniría una subcomisión de la comisión concertadora; sin embargo, como sostiene el Fiscal de Anthoc, “pensamos que el paro trascendió el marco laboral y tiene un carácter social relacionado con otros sectores sociales además de los trabajadores de la salud”.