{image}http://www.eldia.com.co/images/stories/151208/contralor.jpg{/image}La Contraloría Distrital halló varias irregularidades en la ESE Hospital de Cartagena, en la auditoria realizada a 6 entidades de salud del Distrito. 25 hallazgos de presuntas inconsistencias determinó el ente de control, varios casos con implicaciones fiscales, dado el supuesto detrimento patrimonial de la entidad cuyo monto se calcula en $691 millones de pesos.
De los hallazgos encontrados, 11 tienen implicaciones disciplinarias, 7 no tienen alcance ni disciplinarios, ni penal ni fiscal, solo un caso es de índole penal, los restantes serán remitidos a la Fiscalía y la Procuraduría.
La ESE Hospital de Cartagena de Indias fue la que mas dio de que hablar en los resultados de la auditoria a la que fueron sometidas seis entidades prestadoras de salud, dando como resultado el puntaje mas bajo de todas las auditadas por la Contraloría Distrital.
Se criticó duramente que la ESE no entregó oportunamente la información que le fue requerida, 45 contratos que no había relacionado por un valor que asciende los $1.347 millones de pesos y las muchas inconsistencias en la contratación y gestión en la pasada administración.
Se revisaron 78 contratos de un total de 152 suscritos por la ESE Hospital de Cartagena durante el periodo de 2007, esta contratación suma $22.534 millones de pesos, que equivalen al 77% del valor total contratado por la entidad el año pasado; así lo anunció el ente de control.
Hernando Sierra Porto Contralor Distrital, se pronuncio diciendo que en varias oportunidades se había advertido de las irregularidades y se hizo caso omiso a ellas, “la ESE se suscribió a un plan de un plan de mejoramiento, el cual nunca cumplió. Es más, dicho pacto no reposaba en la gerencia de la entidad, ni tampoco sus funcionarios tenían certeza de donde reposaba, al igual que nunca nombraron personal responsable para llevar a cabo ese convenio y tratar de enmendar los errores”.
Informe presentado por la Contraloría
Una asesora de la ESE cobró el titulo que estaba a nombre de la entidad por valor de $ 49.500.994; hace efectiva la cesión por valor de $26.022.000 y reintegra la suma de $27.172.074; ocasionando que se realizara un pago sin tener en cuenta el principio de unidad de caja.
En el contrato Nº 073-07 suscrito con Sistelcom Ltda., se canceló el valor pactado de $ 76.313.750. y se procedió a su liquidación, sin haberse cumplido el objeto total del contrato. En el contrato Nº 074-07 suscrito con Corporación Aprendiendo a Vivir se realizaron pagos por valor de $375millones sin que existieran los soportes del cumplimiento del objeto del contrato.
También se realizó un contrato por valor de $49 millones 600 mil, pero no existe la certeza de la ejecución de la misma cantidad de obras en los CAPs y UPAs que hacen parte de la ESE, presentándose presuntamente pagos indebidos y una gestión antieconómica. En el expediente del contrato se encontraron firmas distintas correspondientes al mismo contratista.
La ESE H.L.C.I:, no está registrada en Sistema de Información para la Contratación Estatal, SICE; además de ello, no registraron el Plan de compras, ni consultaron precios en el SICE, omitiendo disposiciones de la Contraloría General de la República.
En la rendición de cuentas presentada a la Contraloría Distrital vigencia 2007, por la ESE H.L.C.I, no fue relacionada la totalidad de la contratación suscrita para esa vigencia, al igual que los expedientes de los contratos no estaban foliados y son archivados sin tener en cuenta el orden cronológico de los documentos, por lo que el desorden de archivo es total.
También se detecto que los contratos suscritos por la ESE H.L.C.I., en un 95% no fueron liquidados dentro de los términos señalados por la Ley 80 del 1.993.
En un contrato por valor de $49.600.000 se escogió, aparentemente, la oferta más favorable para la entidad sin tener en cuenta otra que era por igual valor; además de ello, no existe el estudio técnico que demuestre que todas los CAPs y UPAs requerían del mismo tipo de trabajos y en las misma cantidades de obras, por lo que se violó el principio de transparencia consagrado en el artículo 24 de la Ley 80 de 1993.
La Contraloría también recriminó que en materia contractual, de obras civiles para reparaciones y mantenimiento, el mismo servidor publico que hacia los estudios de conveniencia y oportunidad era el mismo que escogía la mejor.
Igual situación se presentó en la contratación para la adquisición de insumos u ordenes de compras donde el servidor publico que hace el estudio de conveniencia y oportunidad es el mismo que escogía la mejor oferta, recibía los insumos y era el interventor, lo que viola el principio de transparencia de los procesos contractuales.
También se halló que se realizaron anticipos a algunos contratos sin existir la motivación de éstos ni tampoco estar de manera expresa a que criterio obedecía hacer un anticipo a un contrato y a otro no, siendo de igual naturaleza.
Se realizó estudio de conveniencia y oportunidad para ejecutar unos trabajos en el CAP de Nuevo Bosque y se invirtieron recursos por valor de $51.969.225 en los meses de octubre y noviembre, sin embargo los servicios de urgencia, procedimientos, sala de observación y atención de partos fueron deshabilitados por no cumplir con algunos requisitos de habilitación y a la fecha de la auditoria aun permanecen cerrados.
Ante lo anterior, la Contraloría consideró que el estudio de conveniencia y oportunidad no reflejaron la verdadera necesidad del CAP del Nuevo Bosque por no estar soportado en un verdadero estudio técnico.
También se detectó un incremento significativo en el comportamiento de la cartera de la entidad, que podía obedecer, al aumento de la facturación que pasó de $15.973 millones 801 mil en el 2.006 a $ 23.479 millones 990 mil en el 2.007. Lo preocupante en este caso, según la Contraloría, es que la recuperación de la cartera morosa fue deficiente o no era cobrada, pudiéndose convertir en cuentas de difícil recaudo, comprometiendo la liquidez a mediano plazo de la entidad y a su vez incrementando las deudas de difícil cobro.
También se determinó que se realizaron muchos gastos con cargo a caja menor y no existen los soportes que justifiquen la compra de bienes y servicios, por lo que era fácil concluir que algunos recursos posiblemente eran malgastados.
Es evidente el mal manejo que se le ha dado a la ESE Hospital de Cartagena, un balance que deja claro los intereses y las razones del detrimento de la entidad en manos de estas administraciones sin idoneidad alguna.
La ESE Hospital de Cartagena de Indias fue la que mas dio de que hablar en los resultados de la auditoria a la que fueron sometidas seis entidades prestadoras de salud, dando como resultado el puntaje mas bajo de todas las auditadas por la Contraloría Distrital.
Se criticó duramente que la ESE no entregó oportunamente la información que le fue requerida, 45 contratos que no había relacionado por un valor que asciende los $1.347 millones de pesos y las muchas inconsistencias en la contratación y gestión en la pasada administración.
Se revisaron 78 contratos de un total de 152 suscritos por la ESE Hospital de Cartagena durante el periodo de 2007, esta contratación suma $22.534 millones de pesos, que equivalen al 77% del valor total contratado por la entidad el año pasado; así lo anunció el ente de control.
Hernando Sierra Porto Contralor Distrital, se pronuncio diciendo que en varias oportunidades se había advertido de las irregularidades y se hizo caso omiso a ellas, “la ESE se suscribió a un plan de un plan de mejoramiento, el cual nunca cumplió. Es más, dicho pacto no reposaba en la gerencia de la entidad, ni tampoco sus funcionarios tenían certeza de donde reposaba, al igual que nunca nombraron personal responsable para llevar a cabo ese convenio y tratar de enmendar los errores”.
Informe presentado por la Contraloría
Una asesora de la ESE cobró el titulo que estaba a nombre de la entidad por valor de $ 49.500.994; hace efectiva la cesión por valor de $26.022.000 y reintegra la suma de $27.172.074; ocasionando que se realizara un pago sin tener en cuenta el principio de unidad de caja.
En el contrato Nº 073-07 suscrito con Sistelcom Ltda., se canceló el valor pactado de $ 76.313.750. y se procedió a su liquidación, sin haberse cumplido el objeto total del contrato. En el contrato Nº 074-07 suscrito con Corporación Aprendiendo a Vivir se realizaron pagos por valor de $375millones sin que existieran los soportes del cumplimiento del objeto del contrato.
También se realizó un contrato por valor de $49 millones 600 mil, pero no existe la certeza de la ejecución de la misma cantidad de obras en los CAPs y UPAs que hacen parte de la ESE, presentándose presuntamente pagos indebidos y una gestión antieconómica. En el expediente del contrato se encontraron firmas distintas correspondientes al mismo contratista.
La ESE H.L.C.I:, no está registrada en Sistema de Información para la Contratación Estatal, SICE; además de ello, no registraron el Plan de compras, ni consultaron precios en el SICE, omitiendo disposiciones de la Contraloría General de la República.
En la rendición de cuentas presentada a la Contraloría Distrital vigencia 2007, por la ESE H.L.C.I, no fue relacionada la totalidad de la contratación suscrita para esa vigencia, al igual que los expedientes de los contratos no estaban foliados y son archivados sin tener en cuenta el orden cronológico de los documentos, por lo que el desorden de archivo es total.
También se detecto que los contratos suscritos por la ESE H.L.C.I., en un 95% no fueron liquidados dentro de los términos señalados por la Ley 80 del 1.993.
En un contrato por valor de $49.600.000 se escogió, aparentemente, la oferta más favorable para la entidad sin tener en cuenta otra que era por igual valor; además de ello, no existe el estudio técnico que demuestre que todas los CAPs y UPAs requerían del mismo tipo de trabajos y en las misma cantidades de obras, por lo que se violó el principio de transparencia consagrado en el artículo 24 de la Ley 80 de 1993.
La Contraloría también recriminó que en materia contractual, de obras civiles para reparaciones y mantenimiento, el mismo servidor publico que hacia los estudios de conveniencia y oportunidad era el mismo que escogía la mejor.
Igual situación se presentó en la contratación para la adquisición de insumos u ordenes de compras donde el servidor publico que hace el estudio de conveniencia y oportunidad es el mismo que escogía la mejor oferta, recibía los insumos y era el interventor, lo que viola el principio de transparencia de los procesos contractuales.
También se halló que se realizaron anticipos a algunos contratos sin existir la motivación de éstos ni tampoco estar de manera expresa a que criterio obedecía hacer un anticipo a un contrato y a otro no, siendo de igual naturaleza.
Se realizó estudio de conveniencia y oportunidad para ejecutar unos trabajos en el CAP de Nuevo Bosque y se invirtieron recursos por valor de $51.969.225 en los meses de octubre y noviembre, sin embargo los servicios de urgencia, procedimientos, sala de observación y atención de partos fueron deshabilitados por no cumplir con algunos requisitos de habilitación y a la fecha de la auditoria aun permanecen cerrados.
Ante lo anterior, la Contraloría consideró que el estudio de conveniencia y oportunidad no reflejaron la verdadera necesidad del CAP del Nuevo Bosque por no estar soportado en un verdadero estudio técnico.
También se detectó un incremento significativo en el comportamiento de la cartera de la entidad, que podía obedecer, al aumento de la facturación que pasó de $15.973 millones 801 mil en el 2.006 a $ 23.479 millones 990 mil en el 2.007. Lo preocupante en este caso, según la Contraloría, es que la recuperación de la cartera morosa fue deficiente o no era cobrada, pudiéndose convertir en cuentas de difícil recaudo, comprometiendo la liquidez a mediano plazo de la entidad y a su vez incrementando las deudas de difícil cobro.
También se determinó que se realizaron muchos gastos con cargo a caja menor y no existen los soportes que justifiquen la compra de bienes y servicios, por lo que era fácil concluir que algunos recursos posiblemente eran malgastados.
Es evidente el mal manejo que se le ha dado a la ESE Hospital de Cartagena, un balance que deja claro los intereses y las razones del detrimento de la entidad en manos de estas administraciones sin idoneidad alguna.