Anthoc subraya que la situación de los hospitales del país es mucho más grave de lo que MinSalud quiere hacerla ver. Proyecta encuentros regionales y nacionales para analizar salidas a la crisis del sector, porque el gobierno se empeña en aplicar medidas para agudizarla.
Esta semana se dio un choque de trenes entre la Contraloría General de la Nación y el Ministerio de Salud. La semana pasada, este último había planteado que de los 948 hospitales evaluados, solamente un poco más de 200 estaban en mediano y alto riesgo, habiendo excluido unos 400 hospitales de esas categorías.
La presente semana en un diario nacional, confirmado en la página web de la Contraloría, el contralor Eduardo Maya Villazón señalaba que la situación de riesgo era para más de 1.000 entidades en el país, todas en peligro de quiebra inminente.
“Hay un pequeño desfase, porque hoy ya no hay mil hospitales públicos en Colombia. Estamos en alrededor de los 948 hospitales. Creo que el contralor sumó también las unidades de prestación de salud, que no son ESE pero igualmente tienen riesgo. Pero lo grave es que el contralor desautorice al ministro y a la Supersalud, y diga que prácticamente son todos los hospitales del país y el 57.7% en alto riesgo de liquidación”, manifestó Yesid Camacho, fiscal de Anthoc nacional.
Apunta un cuestionamiento que resalta en esta discusión. “Habría que mirar quién está diciendo la verdad. Yo pienso que la está diciendo el contralor, fundamentalmente porque uno no se explica cómo en menos de un año se sacó de alto riesgo a más de 400 hospitales, sin que se hayan apropiado recursos ni que se hayan hecho mayores esfuerzos por parte del gobierno nacional”.
Si la realidad que apunta Maya Villazón es cierta, la situación es bastante grave. De ahí que Anthoc esté actualmente en la tarea de la realización de unos encuentros regionales con comunidades y trabajadores. Además, tiene en su agenda desarrollar dos propuestas.
Por un lado, en el mes de agosto, adelantaría un Encuentro Nacional por el derecho a la salud y otra, que es el VI Congreso Nacional por la Salud en Colombia. Este último sería una gran convocatoria para la defensa del derecho a la salud, especialmente, debido a que el gobierno pretende limitar algunos servicios con el argumento de que los recursos no alcanzan para atender a toda la población.