El contacto cercano con las hondas electromagnéticas o llamadas también microondas, a las que estamos expuestos a diario, con elementos tan comunes y de uso diario como celulares,  computadores, microondas utilizado para los alimentos y otros más complejos como antenas de telefonía, torres de alta tensión; son motivo de preocupación por los efectos nocivos que pueden causar en la salud.

 

Las microondas son ondas de radio de alta frecuencia (campos de radiofrecuencia) y como la radiación visible (luz), son parte del espectro electromagnético. Son usadas principalmente para la transmisión de televisión, radares en navegación aérea y marítima, y en las telecomunicaciones incluyendo los teléfonos móviles. En la industria se utilizan para procesar algunos materiales, en medicina el uso es en determinados tratamientos y en las cocinas para preparación de alimentos.

Estas hondas son reflejadas, transmitidas o absorbidas por los materiales en sus trayectorias, de manera similar a la luz. Los materiales metálicos reflejan totalmente las microondas, mientras que los materiales no metálicos como el vidrio y algunos plásticos son mayormente transparentes a las microondas.

Desde hace varios años la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través del Proyecto Internacional CEM, ha establecido un programa para revisar los resultados de la investigación y realizar la evaluación de los riesgos de la exposición a los campos electromagnéticos en el rango de 0 a 300 GHz.

El medico radiólogo Manuel Barajas, experto en el tema, afirma que “Las microondas se encuentran en todas partes y pueden afectar a cualquiera. Definitivamente no se pueden negar los efectos nocivos que produce en quienes se sobreexponen a ésta radiación. Se han desarrollado diversos estudios en varias partes del mundo que argumentan esta situación, sin embargo, pienso que la clave para tener una buena salud y no padecer los problemas comunes como el insomnio o los dolores de cabeza, no es dejar de usar por completo estos artefactos.

Barajas, resalta que todos los excesos son malos, y con las microondas no hay excepción; los efectos se presentan a largo plazo, es importante evitar el consumo de alimentos expuestos  a estas hondas y llevar el celular lejos del cuerpo.

Existen ciertas enfermedades que se le atribuyen a la exposición crónica y se  asocian más tarde con cáncer o envejecimiento prematuro. El síntoma  más común es el dolor de cabeza por contacto frecuente con estas hondas electromagnéticas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) hace algunas recomendaciones:

•    Lleve el celular distante del cuerpo en particular el pecho, es decir siempre procure llevarlo en un bolso o maleta.
•    No se exceda hablando por celular, después de tres minutos ya está contaminando el cuerpo.
•    No es recomendable proporcionar a los menores de 16 años aparatos celulares.
•    Las mujeres embarazadas deben tener un uso restringido de toda clase de aparatos que puedan trasmitir estas hondas.
•    El celular debe apagarse en la noche y si lo mantiene encendido, debe estar lejos de la cabeza.